Ikiru

No quería llegar a la noche sin compañía
y para todos el humo dispuso el bálsamo
(pero nosotros inhalamos el gatillo )
nuestro ímpetu fue pueril e iniciado
el recorrido también fue humo
y sólo no para narcisos marchitados
también las hay profundidades
en las señoritas de áureas caídas
y le dije no quería llegar
pero he llegado
presto a vivir la edad de la promesa
y todas sus traiciones

2 comments:

Anonymous said...

cada vez màs certero, X, directo al blanco y al corazòn,te abrazo mucho y siempre ,say no more!

cmp said...

Joan, que gusto saber de ti, gracias por comentar...
un abrazo.