Como la sombra
que el sol dispone
al pie de los postes peregrinos,
me tiendo sobre el lomo de la cebra,
que se eriza al tacto de mi oído,
porque me gusta el silencio
de largas autopistas
onduladas por la arena,
bailar con la bulla
de un humeante corazón
Avenida el pacífico
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cmp
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Tuesday, January 08, 2008
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